miércoles, 20 de julio de 2016

Mensajes

Una avioneta surcaba el cielo a baja
altura en City Bell

llevándose consigo la melancolía
ubicua de una tarde de verano más.

El bramido de una explosión sobre
la abigarrada geografía de casas
y piletas nunca llegó.

De pronto, sentí dentro mío
algo que se desordenaba lentamente.

domingo, 17 de julio de 2016

Lecciones de política

Yo vivía en el “Barrio 25 de mayo” de Ayacucho, un plan de viviendas a pagar en cómodas cuotas para clase media.
A los pocos años, en los terrenos lindantes, se construyó otro barrio de viviendas: el FO.NA.VI. De casas más simples, para sectores más humildes.
En el medio, había una cancha de fútbol donde, desde chicos, nos mezclábamos todos los pibes de los barrios a jugar al fútbol, a la bolita, cazar mariposas, jugar a la bolita y demás diversiones infantiles.
Entre los dos barrios había una frontera invisible donde, por supuesto, también se ventilaban rivalidades.
Había dos hermanos del “barrio de enfrente” -como le decíamos los que vivíamos de “este lado”-  que siempre buscaban pelea.
A mí se me había cruzado el hermano mayor, más o menos de mi edad (alrededor de 10 años), y cada vez que nos encontrábamos, el desafío a pelear se planteaba. Hasta que un día surgió la ocasión.
Como había calles de tierra en el barrio, un grupo de vecinos había organizado una sociedad de fomento con el fin de pavimentar las calles que, con cada lluvia, se tornaban imposibles de transitar.
Ese día habían organizado un baile a la vuelta de mi casa, en la esquina de la calle Yrigoyen y Villardaga.  Las luces, los globos, la cumbia, el piberío coloreaban la noche. En ese clima de jolgorio recibo un empujón desde atrás. Cuando me doy vuelta me sorprendo al ver que me invitaba a pelear el hermano menor de mi contendiente.
Los manotazos empezaron a volar cuando un golpe me impacta en la sien y en un instante que pareció eterno la vista se me nubló y todo se volvió negro.
El golpe no pasó de ser un fugaz parpadeo de la conciencia, pero cuando me recobré de ese impactó, no volví a ser el mismo, aunque tardé en comprenderlo.
Esa fue mi primera lección de igualdad. Y no tuvo nada que ver con la ley del más fuerte. Ni la primacía de la violencia. Claro está.
Ese pibe al poco tiempo empezó a recibir otros golpes. No llegó a pasar la adolescencia y tuvo el primero de varios hijos en un encuentro rápido con las responsabilidades de la adultez. Se convirtió en albañil o changarín y en eso debe andar, con suerte.
Hubo otros pibes de ese barrio –muchos- que terminaron presos, muertos en circunstancias poco claras, en conflictos con la ley. Otros emigraron hacia Mar del Plata a trabajar en un horizonte supuestamente más promisorio; en la mayor parte de los casos, engordando el lumpenproletariado urbano.

viernes, 8 de julio de 2016

Despedida

dolor
que atesoramos,
cifra de los días
que vienen

dolor
que nos pertenece,
junto a sales y enseres

dolor
que no venera
el hambre ni la sed

dolor
que nos espera
en el umbral,

despedida

sábado, 2 de julio de 2016

Luna naranja / Erykah Badu

Aquí va traducción aproximada de esta hermosa canción de la cantante estadounidense Erykah Badu. Pertenece a su tercer álbum de estudio "Mama´s gun" (2000).



Luna Naranja
Soy una luna naranja,
soy una luna naranja,
reflejando la luz del sol.

Muchas noches él estaba solo
muchas, muchas noches.
Su luz era tan brillante, que ellos se alejaron.
Y él permaneció sólo,
cada noche y cada dia

Después se volvió hacia mí,
vio su reflejo en mí
y me sonrió cuando se volvió hacia mí.
Después me dijo...

Qué bueno es, qué bueno es...
Qué bueno es, qué bueno es...
Qué bueno es, qué bueno es...
Qué bueno es, qué bueno es...

Soy una luna naranja,
brillo más que antes,
brillo más que nunca antes...
Soy una luna naranja y brillo tan fuerte...
porque reflejo la luz de mi sol
Alabo al día, el se giró hacia mí
y me sonrió.
Él sonríe y yo me pongo naranja, como amo ser...

Qué bueno es, qué bueno es...
Qué bueno es, qué bueno es...
Qué bueno es, qué bueno es...
Qué bueno es, qué bueno es...

Brilla tan fuerte...
Él gobierna el día, yo gobierno la noche...
Brilla, brilla, brilla
(Oh...)

Qué bueno es, qué bueno es...
Qué bueno es, qué bueno es...
Qué bueno es, qué bueno es..
Qué bueno que es el, qué Dios que es...
Qué bueno es, qué bueno es...
Qué bueno es, qué bueno es...
Qué bueno es, qué bueno es..

Soy una luna naranja
Brillo más que antes, brillo...
Reflejando la luz del sol
Sonriendome...